martes, 6 de agosto de 2013

Claro, le podríamos decir: “La antítesis del Principito” por su afán de conquistar o de destruir, y no de conocer mundos.

Pero de que es todo un personaje, lo es. No una mascota precisamente, si no el operador del modulador “Plutonium X dinamitum 3”.  Gustavo Recinos

No hay comentarios:

Publicar un comentario